Colección de libros españoles raros ó curiosos, Volumen13

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Feliciano Ramírez de Arellano Fuensanta del Valle (marqués de la), José León Sancho Rayón
M. Rivadeneyra, 1879

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Página 226 - Vázquez se le iba a vista de todo el campo, y algunos más Capitanes trataban con Piedrahita cómo poderle matar para asegurar sus vidas. Viéndose él de ellos vendido consigo gime y sospira; de su lecho se levanta, su ropa pide y vestía; trata de salir del fuerte con aquellos de quien fía.
Página 242 - Tolten, que es muy grande , le calentaron é hicieron hervir sus corrientes, causando los mismos efectos desde que se juntaron los dos rios hasta la mar, de suerte que por tiempo de cuatro meses , ni se pudieron beber sus aguas, ni probar el pescado que muerto dió en sus playas , y margenó sus riberas por el mal olor y sabor que el azufre les daba.
Página 226 - Girón no vio lo que pretendía, la mayor fuerza del campo descargó en la toldería, diciendo: "Alto, caballeros", muy en orden se retira. Vuelve los suyos al fuerte donde primero salía, con menos hasta doscientos que quedado se le habían.
Página 223 - Tomárala por la mano, a Barba la encomendó; los sollozos que dan ambos, de vellos es gran dolor. Hacen triste despedida, mortales están los dos. Allí llega un sacerdote, grande priesa da Girón, apriesa pide el caballo; primero que en él subió besárala en el carrillo, palabra no le habló. Con furia parte del fuerte; la mujer que ir le vió, llorando que reventaba, a sus soldados habló: — ¿Qué es de vuestro General?
Página 233 - Relación verdadera de las pazes que capituló con el araucano rebelado el Marqués de Baides, Conde de Pedroso, Gouernador y Capitán General del Reyno de Chile, y Presidente de la Real Audiencia. Sacada de sus informes y cartas, y de los Padres de la Compañía de Jesús, que acompañaron el Real exército en la jornada que hizo para este efecto el año passado de 1641.
Página 243 - ... abrió boca cuando reventó, dejándole dividido en dos pedazos, el uno que cayó a la parte del oriente, y el otro a la del occidente, y la laguna de la Villarrica creció hasta derramarse por los campos, inundando las tierras y...
Página 182 - ... que le parecía que aquella tierra era muy áspera y muy doblada , y que tenía muy más áspera la salida que la entrada, y la gente de aquella comarca era más belicosa y animosa que otra ninguna, y que sospechaba que le habían de tomar los pasos, y que, si así fuese, tenía por muy dificultosa la salida. Y que si supiese que se juntaban y le tenían ganados los pasos, que no saliese en ninguna manera sino que se estuviese en el valle, que es tierra llana y abundosa de mantenimientos, y que...
Página 244 - Apocalipsis, en quien reconocen los expositores sagrados a la gentilidad, idolatría y deshonestidad, que tan arraigada está entre estos indios. Con que parece podemos esperar en la Divina Misericordia se ha llegado ya el tiempo en que por medio de predicadores apostólicos, por quien clama ya este gentilismo, quiere que sea desterrada a despecho suyo esta bestia que ha tenido tiranizada a su dios...
Página 241 - Viéronse en este tiempo en el aire formados dos ejércitos y escuadrones de gente armada, puestos en campo y orden de pelea, el uno á la banda de nuestras tierras, donde sobresalía y se señalaba un valiente Capitán en un caballo blanco, armado con todas armas y con espada ancha en la mano desenvainada, mostrando tanto valor y gallardía , que daba alientos y ánimo...

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