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mez»28 se limite tanto su área de descubrimientos?

En la primera duda hay que plantear la cuestión con otra interrogación: ¿cuál de los dos autores, Oviedo ó Santa Cruz, es más digno de fé en este punto? Para nosotros, no cabe vacilación al respecto.

Santa Cruz y Oviedo comunicaron de cerca á Gómez, acaso el primero más que el último, y aquél, en todo caso, por más tiempo; la relación de Santa Cruz es perfectamente detallada y precisa; la de Oviedo, por extremo general y comprensiva: aquélla figura en una obra especial, y ésta en una general; Santa Cruz era cosmógrafo de profesión; Oviedo, un simple cronista.

Respecto al segundo punto, la explicación.

28. El que aqui damos está tomado de la Découverte de Terreneuve. Paris-Londres, 1900, 4.° mayor, de Mr. Harrisse, y idéntico al que figura en el Islario de Santa Cruz. Es muy poco reducido respecto del original.

Y para concluir con lo relativo á este Islario, cúmplenos hacer notar que en realidad es el mismo que lleva el nombre de Andrés García de Céspedes, habiéndolo éste copiado con lijeras variantes de la obra del cosmógrafo sevillano. La comparación de su texto en ambos autores, que trae Harrisse, (p. 237), al menos. asi parece demostrarlo.

nos parece muy sencilla: esos mapas dan fé de las tierras que descubrió Esteban Gómez, sin que esto excluya que su exploración ó el limite de su viaje no fuera mucho mayor. Y asi, en esta parte adherimos á la opinión de Mr. Harrisse, que es la que sustenta al fin como conclusión de su estudio relativo á Gómez.

En todo caso, ateniéndonos á lo que resulta del mapa que acompaña al Islario, debemos todavia asignar á Gómez como limite de sus descubrimientos desde los 38 hasta los 45 grados de latitud norte, lo quë equivale a decir que fué él quien exploró por primera vez, más o menos desde el Chesapeake hasta algún punto de Nova Scotia. 29

En cuanto al itinerario que siguiera en su viaje, todo induce à creer que desde que salió de la Coruña puso proa al norte, yendo á tocar también al norte de la entrada del

29. Estudiando Harrisse el mapa del Islario en su cotejo con el de Weimar y el de Ribero, y en vista de que Oviedo describe la misma costa que figura en aquél, siguiendo la carta de Chávez, trasuntadą del Padrón Real, como se sabe, llega á la conclusión de que Santa Cruz en su diseño no hizo sino copiar la misma fuente.

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golfo de San Lorenzo, en algún punto de Newfoundland, que de ahí volvió al sur, reconociendo de paso la llamada isla de San Juan, sin duda la Cape Bretón, y que siguiendo la misma dirección, fué à detenerse al Rio de los Gamos, 30 que seria el Penobscot River; que después de desengañarse de que por alli no habia paso de mar, capturó los indios que llevó á España, y continuando hasta la Florida, fué à tomar refresco en el puerto de Santiago, de donde prosiguió su viaje, para llegar á la Coruña a fines de Mayo ó en los primeros dias de Junio de 1525, esto es, á los diez meses de su partida.

30. Oviedo lo sitúa en 43 grados, 30 minutos. Tomo II, P. 148.

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V

ENEMOS ya noticia por el relato de Mártir de Angleria del quid pro quo á que dió origen la llegada de Gómez á la Coruña, y sabemos también, por lo que cuenta Oviedo, que en Noviembre de aquel año (1525) el piloto portugués se presentaba en Toledo á dar cuenta al Emperador del resultado de su viaje, llevando à algunos de los indios que apresó en las costas del norte de América y que se asegura fué obligado à poner en libertad.

Ignoramos en qué se ocuparia Gómez en los meses que siguieron à su entrevista con el Monarca en Toledo, ni cuánto tiempo se quedara en esa ciudad, si bien es de presumir que no seria muy poco, porque en carta que con fecha 20 de Diciembre de1527 dirigia á los consejeros de Indias les recuerda que alli le habian hablado de los

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