Dia 5 de Marzo.-Salimos de Amuzgos, y andadas dos leguas Hegamos á un planecito donde está un trapiche llamado Montalvan. Presentósenos allí una agraciada vista que forman unos cuadros de nopalera, hechos á propósito con simetría, para cultivar la cochinilla, naranjas dulces, y arboleda que riega un arroyuelo inmediato, y todo nos brindó al descanso. Almorzamos, y tomamos el camino para Cacahuatepec, que dista como media legua, y es lugar como de cincuenta familias; toca á la jurisdiccion de Ometepec y doctrina de Amuzgos. Completamos la jornada de seis leguas en Huajintepec, andando por camino quebrado y pedregoso, aunque cubierto de arboledas que templan los ardientes rayos del sol. Su poblacion es igual á la anterior y toca á la doctrina y jurisdiccion de Ometepec.

,,Dia 6 de Marzo.-Continuamos el camino por entre arboledas, aunque bien quebrado y molesto, hasta Huixtepec que dista cuatro leguas y media. Desde la cumbre se divisa el mar, cuya vista alegró mucho á los valerosos costeños, recordándoles sus primeros triunfos, y con festivos gritos y algazara presagiaron la próxima y total ruina del comandante español Páris. Este lugar tendrá sesenta familias; produce las frutas de tierra caliente; toca lo civil y eclesiástico á Ometepec, lo cual tiene muy disgustada á esta poblacion, así como á la anterior, porque en todo el año solo se dicen cinco misas por lo muy crecido del rio.

,,Dia 7 de Marzo.-Celebradas cuatro misas que regocijaron á aquel pueblo, deseoso de ellas, y vestida la tropa de uniforme, tomamos el camino de Ometepec. Andadas cuatro leguas de bajada pedregosa é incómoda, llegamos al caudaloso rio de Santa Catalina, que uniéndose á otros desemboca en el mar por Tecuanapa. Es abundante en truchas y mojarras, y en los bajos de robalo y lisa; pero los naturales son tan indolentes, que jamas echan la red ni el anzuelo para pescar, siendo este un renglon que podria surtirlos y formar un artículo de comercio. Tiene anchas y vastas vegas en las que se hallan el plátano, algodon, melon y sandía. Pasado el rio, sigue legua y media de subida, en cuyo término se halla la poblacion, cabecera de subdelegacion y curato. Por el gobierno civil pertenece á Puebla, y por el eclesiástico al de Oajaca, tendrá como mil almas, y algunas casas razonables, entre ellas la de Páris que le edificaron los que aprehendia. Su nombre es allí odioso y detestable, pues en diez años que estuvo de juez, no dejó vecino con principal; á unos, por las fianzas que en su favor otorgaron; á otros, por las crecidas costas que les exigia en los pleitos; y á otros por medio de las inícuas tramas de que usaban esta clase de subdelegados. Este pueblo solo produce tamarindos, su agua es malísima y dista tres cuartos de legua: su temperamento muy cálido y solo abundante de alacranes. Los españoles habian tenido tan ocupados los brazos de aquella gente, y hecho tantas extracciones de víveres, que

no se encontró ni un huevo, maiz, ni cosa alguna, habiendo sido necesario traer toda provision de á fuera para la tropa. El Sr. Morelos agregó esta subdelegacion con la de Jamiltepec y Juztlahuaca á la intendencia de Guadalupe de Tecpan que estableció. Los linderos de ésta son: por el Sur el mar, por el Poniente y Norte el rio de las Balsas, ó sea el de Mescala, que tiene su origen en Tlajiaco, toma despues el nombre del rio Mixteco, y uniéndose al poblano circunda á Zacatepec hasta entrar en el mar. Por el Poniente el rio Verde que nace en los montes de Putla, y dejando en su seno la provincia de Jamiltepec corre hinchado hasta el mar; de modo que por donde estos grandes rios no sirven de barrera á la provincia, está la alta muralla de los encadenados cerros de Putla, cuya cordillera es larguísima y tiene excelentes puntos de fortificacion. Esta nueva provincia, creada por el Sr. Morelos desde el prin cipio de sus triunfos, ha prosperado aumentándose su comercio por haber destinado á ella los prisioneros que hacia, que impulsados de la necesidad de alimentarse, se dedicaron á la agricultura.

,,Dia 12 de Marzo.-Una salva de artillería y vísperas cantadas, anunciaron ayer la jura de la junta soberana nacional instalada en Zitácuaro, y se efectuó con la pompa posible. La tropa y oficialidad se vistió con el aseo que pudo en una marcha tan penosa y larga. Formó balla desde el cuartel general hasta la iglesia, donde se presentó el Sr. Morelos de grande uniforme: marchaba á su vanguardia en columna la division de Galeana, y á su retaguardia Ja escolta. Colocóse en la iglesia bajo de dosel. El cura D. Miguel Gomez exigió el juramento sobre los santos evangelios á la oficialidad en el altar mayor, y despues lo prestaron las repúblicas de indios. En seguida comenzó la misa y predicó D. Joaquin Gutierrez, capellan de honor del Sr. Morelos. Concluida esta funcion, formada la tropa en el átrio de la iglesia, hizo el juramento el regimiento de Tlapa con su comandante indio D. Victoriano Maldonado, al frente de sus banderas. Terminada esta ceremonia, se retiró el Sr. Morelos á su posada en el mismo órden en que había venido. Todo contribuyó á dar esplendor á dicha funcion: el aseo de la tropa, su número, su brillante armamento, obró con entusiasmo en aquella gente popular no acostumbrada á presenciar estas escenas, y la desengañó que aquel ejército no era formado de centauros ó alimañas como se les habia hecho creer á las viejas por los españoles, principalmente por las pastorales del Sr. Bergosa obispo de Oajaca.

,,Dia 14 de Marzo.-El deseo de avistarnos con el enemigo que se hallaba en la Palizada, hizo que saliésemos hoy, á pesar de la solemnidad del dia. A las diez y media se puso en marcha el ejército en el órden siguiente. Ocupaba la vanguardia el regimiento del P. Cano. el Sr. Morelos el centro, y Galeana la retaguardia. El camino como de tres leguas para llegar al rio Quesala, en la mayor parte es bajada, pero cómoda; despues se entra en un hermoso ila

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no para llegar al rio: en su playa hicimos mansion con gusto de la tropa, pues se halló buena y verde pastura para la caballada. En aquellos terrenos inmediatos se produce un tabaco muy oloroso; pero tan fuerte que excede al supremo de las Villas, no obstante su poco cultivo.

,,Dia 15 de Marzo.-Salimos muy de madrugada para un potrero que llaman del Reparo, distante cinco leguas de un camino llano y muy agradable, compuesto todo de callejones, en que las altas ceibas enlazadas en las copas de los demás árboles, y retorcidos bejucos que se dilatan hácia todas direcciones, sobre alegrar la vista alivian al caminante del calor excesivo. Pocos lugares hay á propósito para fundar una ciudad como éste, y que pueda hacer ricos y felices á sus moradores, pues todo aquel llano es una continuada primavera. La inmediacion al mar, los muchos y gratos peces que produce, las cosechas de algodon, tabaco, y toda clase de frutas y plantas, y mejoras de que es susceptible aquel terreno feracísimo, con la fácil navegacion del Quesala, forman un todo á que nada falta, ni para el regalo, ni para la codicia.

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,,Dia 16 de Marzo. Despues de andar cinco leguas de loma, aunque de buen camino y sombreado, llegamos á la Palizada, último campamento de Páris. Este punto está situado en la playa, y el mejor es una roca que forma como cerrillo, en cuyos crestones amarraban las lanchas que servian á dicho campamento para defenderse por mar; no es defendible por tierra; las rancherías están distantes, hay muy poca agua dulce, y para encontrar pastura es menester andar una legua; mas por agua está bien defendido, porque el punto mas cómodo para un desembarco es el pié del peñasco que presta extension para mas de dos mil hombres, que atrincherados serian inexpugnables, y podrian cómodamente emplear su artillería. Tiene además la gran ventaja de que por allí se hace la provision para el puerto de Acapulco. Páris abandonó este punto cnando supo nuestra aproximacion, aun antes que llegasemos á Ometepec. Despues volvió el comandante Rubido, y aunque escribió al Sr. Morelos varias cartas llenas de arrogancia, parece que solo vino á dar testimonio de su cobardía, pues la víspera de que nuestras tropas se batieran con él, se arrojó precipitado à una lancha besando antes el suelo que queria bañar con su sangre, y llorando tristemente su tierna despedida.

,,Dia 17 de Marzo.-Dispuestas las trincheras en este punto, y confiada su defensa á un comandante de la satisfaccion del Sr. Morelos, mandó se celebrase una misa de gracias por la expedicion comeuzada, y marchamos para Rancho Nuevo que dista como cinco leguas, camino todo de loma, pero cómodo y con buenos pastos.

Dia 18 de Marzo.-La jornada de hoy de siete leguas, es la mas penosa que ha hecho el ejército hasta el parage de la Cruz Alta, la mayor parte de loma, y con algunos pedazos de bosque muy

propósito para que se ocultase el enemigo. Aunque este parage tiene porcion de jacales, los encontramos abandonados de sus dueños. Absolutamente no hay pastos sino á larga distancia, como ni tampoco aguas. Reuniéronse allí muchas circunstancias para probar la constancia y valor con que nuestro ejército arrostraba los mayores contratiempos y peligros.

,,Dia 19 de Marzo.-Dia de regocijo por ser cumpleaños del Sr. Morelos. Cuando otro lo hubiera empleado en banquetes y regoci jos, el general suspendió su marcha, y se detuvo en este páramo solo porque se quedaron á pié muchos soldados, y cansadas sesenta mulas de carga. Su trabajo en el despacho fué igual al de los demás dias. No permitió que se le hicieran salvas ni saludos, ni recibió otro obsequio que el sincero afecto de cuantos le rodeabamos. Su vida es una série continuada de trabajos de toda especie: su comida un pedazo de carne fria, sentado en el suelo, y casi no des

cansa.

,,Dia 21 de Marzo.-Despues de cuatro leguas de camino, llegamos al rancho del Palomar que se encontró de todo punto desierto. Sus dueños, que eran unos negros mal prevenidos contra nosotros, no solo abandonaron aquellos lugares, sino que encontrando diez de ellos á algunos de nuestros soldados dispersos, mataron á dos que no se precaucionaron, porque los creyeron amigos. Este rancho es abundante en pastos; pero su agua, que es de una laguna, es malísima y lodosa.

,,Dia 22 de Marzo.-Llegamos á la hacienda de San Marcos, despues de caminar seis leguas de loma con algunas barranquillas de paso dificil. No hay media vara de pared en que no se vea un' balazo: las tejas y puertas todas están hechas pedazos, pues aquel lugar ha sido el teatro de la guerra en repetidos combates. Mas de mil enemigos con tres cañones encerraron aquí al valiente capitan' Montoro, quien con solo veintiocho fusiles y dos pequeños cañoncis tos les resistió tres dias y cuatro noches, hasta que acosado por el hambre y sed rabiosa, y con solo cuatro cartuchos por plaza se sa lió con precipitacion arroyando á los enemigos, y abriéndose camino entre sus bayonetas, sin embargo de haber recibido un balazo en la cabeza: los enemigos dejaron insepultos los cadáveres de los nues tros, y hoy hemos cumplido con este deber religioso. Hay en la hacienda porcion de jacales cómodos; pero ninguno habitado: tiene agua en abundancia y cerca.

Dia 23 de Marzo.-Hoy despues de haber andado tres legnas de camino barrancoso y áspero, nos quedamos en el parage del Tamaríndo, y como los aposentadores no nos esperaban en él, y es un desierto, todos nos quedamos sin comer, incluso el Sr. Morelos: no hubo pan ni tortillas, un añejo chicharron de chivato fué su único manjar, y.... gracias. Sin embargo todos estuvimos alegres. En aquel punto hay buenos pastos y un fresco arrollo inmediato.

Dia 24 de Marzo. Salimos por las mojadas arenas de los ar royos, y despues comenzamos á encumbrar unas lomas, cuyas ci mas presentan la perspectiva mas grata y pintoresca. Rodéalas el mar como á distancia de una legua por el Poniente y Sur, y se øyen sus bramidos. Por los otros vientos se ven unas largas cordilleras de cerros poblados de arboledas: sus bajos son en la mayor parte unas barrancas tupidísimas de los mismos. Sigue despues una barranca suave para llegar al pueblo de Cacahuatepec, cuya vista excitó la compasion á par que la cólera de todo el ejército, pues los enemigos arruinaron hasta los cimientos de las casas, dejando solo su iglesia y curato, obligando con esto a sus habitantes, desgraciados á vivir en un cerro inmediato incómodo, y aun á mudar el vado del gran rio Papagayo. Su cura los abandonó pasándose á los enemigos. La tropa se indemnizó hoy de los trabajos de los dias anteriores, pues tuvo tortillas, maiz y carne fresca y gorda en abundancia, y además ricas sandías que vendieron los indios, quienes á pesar de tanto infortunio, se han mantenido fieles á la causa de la nacion. El ejército descanso aquí un dia.

Dia 26 de Marzo.--Pasamos el bellísimo y magestuoso rio del Papagayo: anduvimos tres leguas, la mayor parte de ladera, y algunos pedazos incómodos, hasta llegar al Cuauhlote: hubo abundante pastura y mucha vaca: el camino está lleno de chirimoyos que la tierra produce naturalmente.

Dia 27 de Marzo. -En la historia de muestra revolucion se pronunciarán con respecto los nombres del Veladero, Aguacatillo y Tonaltepec, que están á nuestra vista; pues á ellos llegó el general Morelos cuando no contaba en su hueste mas de cuatrocientos hombres, ochenta armas de fuego, y el resto con machetes, hondas y garrotes; y el enemigo tenia infinita mayor parte, con mas dos mil fusiles, y el resto repartido en diversos puntos ventajosos. Sin embargo Morelos los afrontó con tan poca fuerza, resistió treinta y tres' ataques, y un sitio de mas de un mes en el punto llamado el Paso; y últimamente, asaltó en su mismo campo (de los tres Palos) al comandante Paris tomándole mas de mil fusiles, su artillería, caja militar y equipajes: todo esto es admirable, y casi excede los términos de la creencia. Efectivamente, veinte hombres rechazaron tras de sus trincheras á quinientos enemigos: nuevo hicieron frente en una loma á setecientos, y les quitaron una culebrina: un espía, á quien sorprendieron en una vereda estrechísima á tres fuegos, se abrió paso con los estrivos de su silla de montar por entre los fusiles, y eran tantos los balazos que le cruzaban, que el macho sobre que cavalgaba se paraba á cada instante sacudiendo las orejas; por fin, éste hombre mata á uno de un tajo de revés, y lejos de acobardarse, cuando ya se ve libre del peligro, acude encolerizado al campo de Morelos pidiéndole una escopeta para vengarse de sus enemigos. Este hombre famoso era conocido con el nombre de Pedro