Imágenes de páginas
PDF
EPUB

DOCUMENTOS

205 para el día 18 de agosto del año pasado de 1731 años, en que fue electo en ministro provincial, nuestro reverendo padre fray Francisco Serrano, lector jubilado presidiendo á dicho capítulo nuestro muy reverendo padre fray Antonio del Castillo, lector jubilado, calificador del Santo Oficio, actual difinidor y padre de la santa Provincia de los Doce Apóstoles de Lima, habiendo aceptado dicho nombramiento y visto y leido las constituciones antiguas de dicho Colegio, hechas en el capítulo que celebró esta dicha santa Provincia el año de 1680, á 24 de febrero; añadimos algunas cosas y quitamos otras que juzgamos oportunas á la mejor dirección y adelantamiento de los estudios y demás regularidad de dicho Colegio, y las redujimos á mejor método: las cuales constituciones, corregidas, añadidas y ordenadas son en la forma y modo siguiente, y hacemos presentación de ellas á los reverendos padres del Venerable Difinitorio, para que, vistas y examinadas, si fuere visto conveniente, se aprueben, confirmen y se les añada la fuerza que de derecho se requiere para que se observen perpetuamente con firmeza y fuerza de leyes.Fray Francisco Arteaga.-Fray Juan de Buiza.-Fray Francisco de Santa Coloma.—Fray Francisco Beltrán.

I. DE LOS RELIGIOSOS QUE HAN DE MORAR

-

EN EL COLEGIO DE SAN DIEGO.

Los religiosos moradores del Colegio han de ser sólo éstos, conviene á saber: el Padre Rector, el Padre Regente, cuatro padres lectores de teología, el primero de Prima, el segundo de Vísperas, el tercero de Moral, more scholastico, y el cuarto, de Escritura. Dos maestros de estudiantes, uno de Artes y otro de Teología; cuatro sacerdotes que sean confesores de seglares, tres pasantes y un lector de Artes; doce estudiantes, seis teólogos y seis artistas, y podrán llegar hasta diez y seis, si fueren de conocida habilidad, con tal que si faltaren algu nos de una Facultad, se augmenten los de la otra; y estando este número completo, no se augmente; mas, si algunos padres de religiosos, parientes ó bienhechores se obligaren á la congrua de alguno ó algunos estudiantes, podrán admitirse, siendo de capacidad. Si algún padre lector jubilado ó más, creciendo la Provincia y habiendo comodidad, pidiere morar en el Colegio, nuestro reverendo padre Provincial lo asigne

por morador de él, con la obligación de que asista á la sabatina, piques de punto, conclusiones y algunas conferencias de cada semana, ya de Artes, ya de Teología, por el fruto que podrán sacar de su asistencia y réplicas los estudiantes; y aunque haya de haber sermones en el convento, no se asigne predicador conventual, y predicarán los lectores á la disposición del Padre Rector, excusando lo posible al lector de artes, por su mayor ocupación; y aunque guste de predicar no se le consienta sino una ó dos veces al año, y esto sin que falte á función alguna de su oficio.-No se reciban huéspedes en el Colegio, aunque sean religiosos nuestros, y menos retraídos; mas, si tal vez se admitiese algún huésped de respeto, no sea en concurso de otro, y ninguno pase más de dos días.-No se haga el convento escala para venir de otros conventos á los de esta ciudad, ni para salir de éstos á aquéllos ó á otras partes, ni à título de huéspedes coman ó pernocten en él.-Suplícase á nuestro reverendo Padre Provincial que en la visita del Colegio abrevie todo lo posible y que no envíe á él más moradores ni menos de los asignados en estas constituciones, ni huéspedes religiosos, ni retraidos; y sólo consienta donados por compañeros a los religiosos á quienes los consiente. el convento de Nuestra Señora del Socorro, si no es que á su P. R. parezca convenir otra cosa.

II. DE LA DISTRIBUCIÓN CUOTIDIANA DE LAS HORAS DEL DÍA.

[ocr errors]

A las cinco de la mañana se han de levantar á estudiar todos los estudiantes, para lo cual tendrá el cuidado de velador un corista estudiante, el cual, si no diere luz en la hora señalada, sacará la cama al refectorio y hará la penitencia en él; y habiéndose levantado á la dicha hora, estudiarán hasta las seis. A las seis en punto tocarán á prima y la rezarán con las demás horas; y después de nona, inmediatamente los estudiantes que no hubieren de celebrar oirán todos juntos una misa rezada. — Acabada de decir la misa, tocarán á estudio quieto à todos los estudiantes para que repasen sus lecciones; y á las siete y media se tocará á lección de Prima y de Artes. La de Artes durará hasta las nueve; la de Teologia hasta las ocho y media, y en la otra media hora repasarán los teólogos la lección de nona, para lo cual se les tocará segunda vez á estudio quieto. A las nueve tocarán á lección de

nona á los teólogos, que será de Escritura. La lección ha de leerse in scriptis more scholastico. A los artistas tocarán á estudio quieto y estudiarán desde las nueve hasta que toquen á comer. A las diez tocarán á conferencia de Teología y du rará la conferencia hasta las once y media. A las once y media ó antes, acabada la conferencia de Teología, se tocará á comer, y en saliendo dé comer, se concederá como media hora de quiete. A las dos de la tarde en punto se tocará á vísperas y las rezarán juntas con las completas, cantando después de ellas la Tota pulchra est Maria. A las tres de la tarde tocarán á lección de Vísperas y de Artes; la de Teología durará hasta las cuatro y la de Artes hasta las cuatro y media. Si se hubiere de leer cátedra de Escriptura, todos los dias se tocará á ella á las cuatro, porque sólo la oyen los teólogos; y de no haberse leído por la mañana de nueve á diez la de Moral, por alguna ocupación inexcusable, y no habiendo lección de Escriptura de cuatro á cinco, se leerá la de Moral, porque queremos que nunca falte. A las cinco tocarán á conferencia de Artes y durará la conferencia hasta las seis y media. A las seis y media tocarán á maitines, y después de ellos habrá oración mental y disciplina, como y cuando lo ordenan las constituciones generales. A las ocho, ó en saliendo del coro, tocarán á cenar, y en saliendo de la cena se permitirá media hora de quiete. Después de las nueve de la noche, poco más o menos, se tocará á silencio y descansarán del trabajo del estudio hasta las cuatro de la mañana, siete horas ó cerca de ellas, en las cuales y en las de la siesta ordenamos que no se mande ó haga estudiar á los estudiantes para que conserven la salud y fuerza para sus ejercicios y tengan tiempo en que puedan acudir á los espirituales de su devoción particular.

III. DE LA DEMÁS DISTRIBUCIÓN DEL TIEMPO.

Los estudios, así de Artes como de Teología, comenzarán desde el domingo de Cuasimodo y durarán sin interrupción alguna de vacaciones hasta el dia de San Lucas exclusive, desde el cual día hasta el de Todos Santos inclusive tendrán los estudiantes y lectores recreaciones. Desde el día de Finados inclusive se proseguirán los estudios sin interrupción alguna hasta el domingo de Septuagésima, en el cual comen

zarán las segundas recreaciones, que han de durar hasta el de Quincuagésima inclusive. En las cuaresmas hasta el domingo de Cuasimodo no cursarán los teólogos, mas observarán sus horas de paso público y acudirán á las conferencias de los artistas, que han de cursar también en las cuaresmas hasta el domingo in palmis, y desde este día vacarán también hasta el domingo de Cuasimodo. observando, empero, las horas de paso, como los teólogos. Todos los jueves del año, á la tarde, serán día de asueto, menos los de las semanas que tuvieren algun día de fiesta de precepto, que en estos y en los domingos no hay lección. Por días de fiesta de precepto, fuera de los que señala la nueva reformación de nuestro santísimo padre Inocencio X, señalamos los días de Nuestra Señora del Carmen, de nuestros padres Santo Domingo y San Francisco, y los patronos San Pedro Nolasco, San Juan de Dios, Santa Clara, los días de los seis doctores de la Iglesia Latina, San Gregorio, San Ambrosio, San Agustin, San Jerónimo, Santo Tomás y San Buenaventura; y los días de Santa Catalina mártir, San Diego de Alcalá, San Antonio, San Bernardino, San Pedro de Alcántara y el dia del padre Rector del Colegio; mas, si.este fuere día de fiesta, se cogerá otro por él: fuera de los cuales días mandamos que no se guarden otros, menos que no sea por voto de la ciudad. El tiempo de los estudios de facultad ha de durar seis años, tres de Artes y tres de Teología, en dos trienios, físicos ó morales, conforme á la celebración de los capítulos ó congregaciones capitulares de nuestra Provincia. Cuando los trienios de ella son morales, por pasar de los tres años fisicos, el tiempo que pasare de ellos, ó parte, á la disposición del Padre Regente, disponemos que se emplee en perficionar á los estudiantes en la gramática, en leerles el libro Quinto ó Arte de hacer versos, ó adestrar en él á los que lo hubieren oído, enseñarles la retórica y noticiarles de toda buena erudición, letras humanas y autores que traten de ellas. Y también se hará esto todos años en las cuaresmas, en que no cursan los teólogos. Procúrese que al fin de sus estudios salgan consumados en todas letras, pues toda erudición sirve á las divinas, y sin tales gracias no tiene un colegio todo el explendor en que debe sobresalir. Pero dichos

ejercicios se han de tener sólo en lugar de las lecciones ordinarias de Artes y Teología, porque las conferencias en mañana y tarde han de ser indefectibles todos los días de estudio, menos los jueves, como también las sabatinas y mensales, lecciones de veinte y cuatro horas y palestras. Mandamos que luego se aprenda la ortografía y que en dichas demasías de tiempo de los trienios morales y en las cuaresmas sea siempre lo primero que se repase, pues su estudio es de cuatro días y su falta de muchos deslucimientos, y más de un teólogo.

IV. DE LOS EJERCICIOS ESPIRITUALES.

Al coro deben ir á todas las horas del oficio divino todos los religiosos moradores del Colegio, menos los padres lectores y maestros de estudiantes, que irán sólo á prima, vísperas y maitines, en días de primera clase; á primeras visperas en los de segunda, en que no hubiere lección, todos los domingos por la tarde y en las festividades clásicas de Nuestra Señora, aunque haya lección, por la cordial devoción que le deben tener los que se dan á las letras, para aprovechar en ellas. El oficio divino se reze siempre con pausa, atenta y devotamente, y nunca se cante hora alguna de él, sino sólo las primeras vísperas, maitines y primera misa de la Natividad del Señor, los oficios de los tres días de semana santa, que ordinariamente se cantan, así vísperas como el día, los maitines y misa de resurrección; las primeras vísperas, maitines y misa de la Asumpción y Concepción de la Vírgen Santísima y de San Diego de Alcalá, por patrón del Colegio; las primeras vísperas y maitines de nuestros padres Santo Domingo y San Francisco. A las primeras vísperas y misa de nuestro padre San Francisco han de ir todos los estudiantes en comunidad y los sacerdotes unos con otros al convento de Nuestra Señora del Socorro y asistirán todos en el coro, cuidando de su asistencia el Padre Rector del Colegio. Nunca se deje la oración mental de prima noche, dis. ciplina y benedicta cantada en los dias que obligan según nuestras constituciones generales, ni la salve de todos los sábados, y á todo acudirán también los maestros de estudiantes y lectores. Item, se ordena que en los santos de primera y segunda clase se cante el himno Te Deum laudamus, pues

« AnteriorContinuar »