Revista de Buenos Aires: Historia Americana, literatura, derecho y veriedades, Volumen19

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Miguel Navarro Viola, Vicente Gregorio Quesada
Mayo, 1869
 

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Página 496 - Californias, y que en lo sucesivo se entienda por una sola Provincia el territorio o demarcación de cada Intendencia con el nombre de la Ciudad que hubiese de ser su Capital, y en que habrá de residir el Intendente, quedando las que en la actualidad se titulan Provincias con la denominación de Partidos, y conservando éstos el nombre que tienen aquéllas.
Página 373 - Nunca reconocerás por gobierno legítimo de tu patria sino a aquel que sea elegido por la libre y espontánea voluntad de los pueblos; y siendo el sistema republicano el más adaptable al gobierno de las Américas, propenderás por cuantos medios estén a tus alcances, a que los pueblos se decidan por él.
Página 392 - Carlos IV (que Dios guarde) y todos los de su real familia, á fin de conseguir del justo y poderoso ánimo de Su Majestad la institución de un reino en aquellas Provincias, y cesión de él al serenísimo infante D.
Página 393 - Por el presente declaramos en todo y en la mas bastante forma : que en justo reconocimiento de los buenos servicios para con las mencionadas provincias del serenísimo señor principe de la Paz, hemos acordado á SAS la pension anual de un infante de Castilla, ó lo que es lo mismo, la cantidad de cien mil duros al año, durante toda su vida, y con el juro de heredad para él y sus sucesores habidos y por haber.
Página 42 - Escribano, le recibió juramento, que lo hizo por Dios Nuestro Señor y una señal de la cruz, según...
Página 22 - Esta moderación influirá sobremanera en que produzcan buenos efectos los pasos que se están dando con España para la consecución de la paz. La demora será también muy útil, porque dará el tiempo suficiente para la meditación, sin encender más los ánimos, ya demasiado irritados con la duración de la guerra".
Página 14 - Con toda claridad, según Herrera', retenían esta noticia los indios de Cuba, y uno de los más ancianos reconvino a Gabriel de Cabrera con estas palabras: Que por qué le reñía, etc., pues todos eran hermanos. ¿Vosotros, le decía, no procedéis de un hijo de aquel que hizo la nao grande para salvarse del agua, y nosotros del otro?
Página 392 - Dios guarde) á fin de conseguir del justo y piadoso ánimo de Su Majestad la institución de un reino en aquellas provincias y cesión de él al serenísimo señor infante don Francisco de Paula en toda y la más necesaria forma: Prometemos y juramos por nosotros y á nombre de nuestros comitentes...
Página 450 - En vista de lo que llevamos espuesto, es evidente que no nos ha quedado sino el último recurso que resta á los pueblos oprimidos, cuando ven que los que los gobiernan se hacen sordos á sus representaciones y á sus gemidos. Hemos llamado en nuestra ayuda á nuestro paisano D. Felipe Ibarra, Comandante General de las fronteras. El llegó aquí el Viernes Santo por la mañana al frente de una tropa de ciudadanos del campo, á los cuales se reunió una porción de nuestros beneméritos hermanos santafecinos.
Página 393 - ... de las tesorerías de América. Y á fin de que la citada pensión sea reconocida y ratificada por el gobierno y representación de las provincias del Rio de la Plata, y necesariamente por el príncipe que sea en ellas constituido, extendemos cuatro ejemplares del mismo tenor, tres de los cuales se remitirán al serenísimo...

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