CONCLUSION. Cuando emprendí la publicacion del Museo de ambas Américas, se me hizo esperar que podia contar con suficiente cooperacion y patrocinio para llevar adelante una obra, que por mí solo no me sentia capaz de sostener de un modo digno del pueblo americano. Mas en los nueve meses transcurridos desde entónces, he visto cada dia mas fallidas las que creí fundadas esperanzas. De 251 artículos de que consta el periódico, 230 han sido suministrados por mí: el número de suscriptores, que en la época mas floreciente no pasó de 249, ha quedado reducido hoi a 88 en Santiago, y 51 en Valparaiso y otros puntos de la República; y aunque se cuenta con 65 mas en el exterior, no compensan ellos los quebrantos que ha sufrido la empresa por las repetidas pérdidas experimentadas en las remesas hechas por los Vapores, no obstante los solícitos esfuerzos y encargos del Sr. Wheelwright. En tal estado, es de necesidad abandonar la obra. Al señalar la causa de la terminacion del Museo, no es mi ánimo quejarme, mucho ménos acriminar a nadie: justo es suponer, cuando una publicacion cualquiera no encuentra proteccion, que esto viene de no estar bien desempeñada, de no corresponder a las necesidades, esperanzas y deseos del público. Así tan solo intento explicar el motivo de la imperfeccion de la obra, para atenuar la censura que sus defectos deben necesariamente haber traido sobre mí, y solicitar la pública induljencia. Habiéndome escaseado su apoyo otras intelijencias; obligado a descansar casi en mis solas fuerzas pa ra leer, elejir materiales, traducir y correjir, no he tenido tiempo para desenvolver en toda su extension el plan de mi publicacion; no obstante el interes y el entusiasmo que por ella he sentido, no me ha sido dable mejorarla en el corto término de su duracion, con los débiles medios que han estado a mi alcance; no he podido dedicarme a concluir varios trabajos que tengo comenzados sobre América, biográficos, descriptivos, estadísticos e históricos, como son: Bolivar, Humboldt, Sucre, San Martin, Unánue, Caldas, Zea, O'Higgins, e Iturbide; Lima, Bogotá, Quito, Guayaquil, Méjico y Cartajena; Ensayo estadístico sobre el Perú; Filosofia de la historia del continente americano; Meditaciones sobre Colombia; y Chile en 1796 1842: para este último trabajo contaba con una preciosa Representacion dirijida a la corte de Madrid por el ilustre finado D. Manuel Salas, documento inédito con que me ha favorecido la amistad del Sr. D. Joaquin Campino, y que daré al Mercurio, juzgando que ya es tiempo que salga de la obscuridad a que injustamente ha estado condenado. Todos los artículos del Museo quedan concluidos, a excepcion del de Valparaiso, porque a pesar de mis reiteradas instancias no he tenido la satisfaccion de conseguir los datos que se me habian prometido, y que eran indispensables para finalizar ese trabajo. Cumplo gustosísimo con un deber que me impone la justicia, al ofrecer el homenaje de mi gratitud a todos los que han mostrado interes en esta publicacion, sea subscribiéndose; sea ayudándome con su colaboracion; sea favoreciéndome con noticias y auxilios literarios. Merece mencionarse entre los primeros el Gobierno de Bolivia; entre los segundos las personas, cuyos nombres o iniciales se encuentran en el curso de Ja obra, y que manifiestan la cooperacion con que me han favorecido; y entre los terceros los Sres. D. Adriano Pourcilié, D. Rafael Valdes, D. Bartolomé Browne, I. Henrique Ward, D. Jorje Wormald, D. Juan Hubert, D. Mauricio Rugendas, D. Henrique Nagel, D, José Antonio Alvarez Condarco, D. Santos Tornero, que con liberalidad me han franqueado sus libros siempre que he tenido necesidad de consultarlos, y el Sr. capitan Heath, superintendente de la Bolsa de Valparaiso, atento siempre a facilitar las colecciones de papeles y revistas que he deseado rejistrar en ese establecimiento. En cuanto a los Sres. D. Manuel Rivadeneyra y D. Santos Tornero, propietarios de la Imprenta del Mercurio, todo elojio de mi parte es corto por el zelo que han desplegado en todo lo concerniente a la empresa, y por la proteccion que le han dispensado, hasta que ha sido forzoso suspenderla. La prensa periódica del pais, que en jeneral ha querido estimularme con su aprobacion y favorecerme recomendando mis débiles tareas, es asimismo acreedora al reconocimiento que cordialmente le tributo. Por conclusion, vuelvo a solicitar la induljencia de los lectores del Museo por sus defectos e imperfeccion. ¡Ojalá que este ensayo no desaliente a otros, que con mas capacidad puedan satisfacer mejor las exijencias del público chileno, y merezcan el patrocinio de los pueblos y de los gobiernos americanos! G. R. Poesías de D. José Zorrilla, juicio de los cuatro primeros 5 15 25 31 33 35 43 47 47 Seleccion de maximas y pensamientos 48 Incidentes de un viaje a Centro-América, Chiapa y Yuca tan, por Juan L. Stephens, artículo primero. 49 La historia considerada como ciencia de los hechos, artícu Comercio de Venezuela en el año económico de 1840 a 1841. La mas horrenda metempsicosis efectuada en América en el siglo XIX, artículo primero. 89 Planes, pronunciamientos y gritos, artículo segundo y úl timo 106 Poblacion de los Estados-Unidos de América. 113 Fragmentos de los cantos del Trovador, por Zorrilla. 115 De la salud de los literatos, de los hombres de gabinete y de los artistas. 187 Progresos en el descubrimiento, conquista y reconocimiento de América, artículo primero. 194 Navegacion por vapor en Inglaterra y los Estados-Unidos La suerte de algunos escritores. Delicias y ventajas del estudio, artículo sexto, Hijiene, preceptos relativos al sueño, artículo sexto Los astros y la noche Fragmento. Chateaubriand y su influencia sobre la literatura francesa, artículo segundo y último. Producto del algodon en el mundo. |