monopolio de los grandes propietarios no ha tocado como un azote la comarca pacífica que recordamos. Ni puede recelarse en ella la anarquía insanable de Bolivia, ni la humillacion de su raza indíjena, salvada de la he atombe de los Incas. Los Estados libertados por Bolivar padecen el doble cisma religioso y político. Colombia fué despedazada por los tenientes predilectos de aquel héroe. Las repúblicas de Centro-América, á manera del istmo en que se asientan, combatido por dos Océanos, luchan entre la discordia doméstica y la ambicion extrangera, en acecho para absorverlas. Si continuamos hacia el Norte este funesto itinerario, veremos que el águila imperial del Sena, mas rauda que la del Anahuac, deja caer de sus garras la diadema de Motezuma, á los piés de un jóven rubicundo, cuyas virtudes para reinar se descifran en el musgoso tronco de su estirpe cesarea, y en la sangre electoral de uno de sus abuelos, el voluptuoso duque de Lorena. En fin, si miramos á la próxima orilla, se nos aparece la Banda Oriental salpicada con sangre fraternal. Entonces un pais como el Paraguay, exento de tales dolores y peligros no podrá acaso felicitarse, y alzar un himno de agradecimiento al Divino Autor de todo bien? Esa misma calma en medio de las pasiones que se agitan á su alrededor y de los écos de revoluciones lejanas, dá á su actitud la nobleza del desprendimiento. Su accion como mediador ó árbitro en este continente guardaria afinidades con todo principio conservador del equilibrio y se ejerceria con fruto. Ni en los amargos desacuerdos con el estrangero, aquella influencia moderadora será menos aceptable ante la circunspeccion de los gabinetes europeos, cuya tibia estimacion á los de América se mide por el grado de estabilidad que ofrezean á sus cálculos. El genio tutelar que inspiró á los Suizos refugiados en sus montañas un heroismo romancesco; ó que en Holanda amenazó romper los diques del mar para sepultar con la patria á sus enemigos estrangeros, protegerá la carrera del pueblo paraguayo idólatra de su independencia. Cuando el sello distintivo de nuestro origen nacional se desvirtúe por la incesante confusion de elementos espúreos, el tipo perdido tal vez se hallará en una sociedad menos esclava de las veleidades de estos tiempos, y mas desprendida de la imitacion servil del estrangero. Las creencias conmovidas por los vaivenes revolucionarios, se asilarian en la conciencia de una nacion inaccesible hasta ahora al contagio de esa filosofía que solo siembra en el corazon el egoismo. Un sistema gradual de colonizacion, bajo el principio adoptado sobre nacionalidad de los nacidos en el Paraguay, robustecerá la produccion, acrecerá los valores territoriales, resguardará las fronteras en los puntos que aun se mantengan vulnerables. Pero respecto de inmigracion, es necesario evitar el escollo de otros pueblos ansiosos de anticiparse á las leyes del tiempo. Allí donde la poblalion es bastante densa, seria insensato imitar ciegamente á los Estados Unidos, que se han asimilado en pocos años millones de estrangeros. Despues de su emancipacion, la República del Norte abrió las puertas del Atlántico y del Pacífico á todos los peregrinos del orbe. Bosques inmensos que esplorar desiertos que solo aguardaban la vara májica de la industria para manar la abundancia; lagos azules que convidaban á surcarlos; el valle del Missisippi capaz de dar asiento á un imperio; en fin, el origen y tendencias. espansivas de la raza anglo-sajona, facilitaban la formacion de una sociedad cosmopolita, adherida á sus nuevos lares por afinidades indisolubles, y por la perspectiva de la felicidad en una tierra virgen. Los Brazos de la República, como los de un coloso, atraian á su seno esa corriente continua que en busca de trabajo, ó de las teorías sencillas de los republicanos huia de un mundo caduco, para refugiarse bajo estrellas propicias á la libertad. Asi se fué desplegando ese sistema suntuoso, que no ha tenido ejemplo en las sociedades antiguas, ni tendrá imitadores en las venideras: asi se aglomeraron elementos que por mas de medio siglo conservaron una cohesion artificial, aunque aparentemente sólida, á la sombra de un dogma inmortal. Pero esa máquina, cuyos resortes ya no eran los de la virtud, segun la candorosa esperanza de los fundadores de Filadelfia, no ha resistido al torrente de una democracia que habia violado el testamento de Washington, y que arrebatada por su propio ímpetu, encontraba estrecho el radio trazado por la naturaleza, bajo las constelaciones boreales. Si nos hemos detenido demasiado en este tópico, es porque consideramos que nada es mas peligroso que la aplicacion extemporanea de réglas adoptadas por una nacion cualquiera, y porque dominan ideas exageradas ó falsas respecto á emigracion, en los nuevos Estados. Ahora, con la relacion al Paraguay, nuestra opinion es que la poblacion estrangera mas conveniente será la española, la belga, y en general la de pueblos agricultores y católicos. Destino adverso de las sociedades americanas es el de no haber madurado bastante los elementos de su nacionalidad, para preservar su fisonomía peculiar. Despues de sufrir el coloniage de tres siglos, y sin más transición que la de los campamentos militares, se lanzaron de repente en el torbellino de ideas que deslumbraban su fantasía, y minaban las antiguas creencias. Los presentes tentadores de la industria se asociaban á los encantos de la literatura moderna, cuyas producciones eran frutos verdaderamente exóticos para inteligencias formadas por una disciplina monacal. Los peligros del cambio se sintieron por todas partes, aunque con diversa intensidad. La República Argentina se halla todavía bajo la influencia de este talismán; y arduos esfuerzos son necesarios para que el sentimiento verdaderamente moral triunfe de los intereses materiales que lo han eclipsado. Por una serie de circunstancias raras, el Paraguay ha escapado de esta perturbacion profunda, y es mas fácil que marchen paralelamente los intereses prácticos y las tendencias espiritualistas, pues el equilibrio no ha sido allí violentamente trastornado. Si el gobierno diese estabilidad á sus instituciones fecundas, si prefiere la justicia al esplendor; si sabe conservar la confianza de los pueblos amigos, y el respeto de sus rivales, el fallo augusto del porvenir puede ser alegremente anunciado por los contemporáneos. Lo demás será efecto de los inexcrutables designios de la Providencia, ó de los favores de aquella Fortuna que preside á la grandeza y á la decadencia de todas las Repúblicas. JOSE T. GUIDO. FASTOS DE LA AMERICA ESPAÑOLA OCTUBRE 1492 Octubre 11-A las 10 de la noche divisa Colón una luz que con otros anuncios de aquel mismo día le hacen concebir la esperanza de tocar á tierra despues de tantas zozobras. A las 2 de la mañana un marinero de La Pinta que iba delante, descubre á la claridad de la luna una punta de tierra. Era de la isla Guanahaní, desde entonnces San Salvador (una de las Lucayas): con la que dá principio el descubrimiento del nuevo mundo. Leese en la declaración de Vallejos (coleccion de Navarrete) que aquel marinero al percibir tierra, se lanzó sobre una lombarda, y dió fuego á la mecha gritando. alborezado Tierra! ¡ Octubre 28-Descubre Colon la Isla de Cuba. 1515. Octubre 8-Se dá á la vela del puerto de Lepe la espedicion de Solis, cuyo contrato habia sido firmado en 24 de noviembre del año anterior por el rey de España. Dicha espedicion tocó en Tenerife, reconoció prolijamente la costa del Brasil, y las islas de Lobos, y tomó puerto en Maldonado, al que dió el nombre de N. S. de la Candelaria. Llamó tambien Mar dulce á la gran corriente de agua que los indíjenas |