Lavalle fué el mismo de Rio Bamba y Junin.

Encontrando en su carga un obstáculo, desfiló impertérrito bajo los fuegos del enemigo; y lanzándose sobre él por un flanco le hizo una espantosa carnicería.

Brandsen fué el mismo de Nasca.

Como Milhand en Waterloo, quedó tendido sobre la línea del cuadro brasilero.

Olavarria el mismo de Ayacucho.

Su lanza derribó cuanto se le opuso, y los poetas cantaron su marcial gallardía.

Después de 1828 el ejército argentino se deshizo.

La guerra civil devoró sin piedad á los leales hijos de la revolucion.

Uno que otro de ellos existe apenas.

Los demas, descansan esperando.

El presente puede olvidarlos. Pero hay una resurreccion histórica para los bravos. Ella llegará, y á contar de esemomento sus nombres vivirán en la omnipresencia del porve nir.

(Concluirá).

Rojas, Mayo de 1863.

LUCIO V. MANSILLA..

BIBLIOGRAFIA Y VARIEDADES

LA REVISTA FARMACEUTICA

(PUBLICACION TRIMESTRAL)

La sociedad de farmacia nacional argentina, tiene por órgano de sus trabajos la publicación trimestral que bajo el nombre que encabeza estas líneas se publica por la Imprenta Tipográfica de Pablo E. Coni. Hemos recibido tres números y podemos asegurar que su lectura nos ha causado una satisfaccion profunda, porque es la prueba evidente de las ventajas de las asociaciones científicas, y un ejemplo cuya imitacion desearíamos se generalizase.

Esta sociedad no puede dejar de impulsar el progreso, y en efeto vemos que se preocupa, entre otras cosas, de la necesidad y conveniencia de confeccionar una Farmacopea Nacional. Esos tres números, únicos que conocemos, forman parte del tomo tercero: esa Revista está en el sesto año de su publicacion y la sociedad que puede sostenerla, manifiesta un grado de desarrollo intelectual, notable ya en la vida y civinzacion de un pueblo.

Entre los artículos inéditos que se registran en Sus pájinas, nos ha llamado la atencion el artículo del doctor don Nicanor Alvarellos-Apuntes históricos sobre la enseñanza de la medicina en Buenos Aires.

Precisamente tenemos á la vista varias Reales Cédulas

que complementan las investigaciones históricas sobre esta materia, y vamos á dar una noticia de ellas.

dice:

Empezaremos por transcribir la Real Orden de 1798,

REAL ORDEN

Exmo. señor: Con fecha 16 del corriente me dice el señor don Gaspar de Jovellanos lo siguiente: A consulta del supremo Consejo de Indias de 22 de mayo próximo pasado, ha resuelto el rey, que se erija en Buenos Aires un Protomedicato independiente del de Castilla y de cualquiera otro, á imitacion de los de Lima y Méjico como estaba acordado desde el año de 83, cuya jurisdiccion y autoridad ha de comprender las provincias sujetas á aquel vireynato, y se ha de componer de un médico y de un cirujano, dotados aquel con 700 pesos anuales, y este con 300 sobre la Real Hacienda, siendo del cargo de ambos enseñar sus respectivas facultades bajo el método y forma que acuerden con el virey, quien nombrará interinamente asesor, escribano y alguacil del nuevo tribunal, los cuales servirán sin dotacion ni otra recompensa que los derechos de arancel, el que formará la Audiencia y remitirá al Consejo para su aprobacion; asi como la instruccion en que se puntualisen las facultades que han de tener y causas de que debe conocer, entendiéndose este establecimiento provisional hasta que arreglado el punto relativo á la ereccion de universidades y estudios públicos, se pueda convinar con ellos la forma permanente que ha de tener. Lo que trasmito á V. E. de Real órden para su cumplimiento.-Dios guarde á V. E. muchos años--Madrid, 19 de julio de 1798-Saavedra.

"Señor virey de Buenos Aires."

Como se vé por la lectura de la disposicion transcripta, en el año de 1798 se obligó al médico y cirujano que formaban el Proto-medicato á enseñar sus respectivas facultades.

Ese es el verdadero origen de la enseñanza de la medicina en Buenos Aires.

El Proto-medicato se estableció en esta ciudad el año de 1799; y por consiguiente no es exacto, históricamente hablando, que la enseñanza pública de la medicina date recien del presente siglo, cuando data de fines del siglo pasado. Queremos hablar con documentos, y al efecto transcribimos tambien la Real órden que aprobó el establecimiento del tribunal del Proto-medicato, dice así:

REAL ORDEN

"Exmo. señor: enterado el rey del contenido de la carta de V. E. de 5 de junio de este año, n.o 3.o., que avisa con testimonio quedar establecido en esa capital un tribunal del Proto-medicato conforme á lo prevenido en Real órden de 19 de julio del año pasado de 98, se ha dignado aprobarle y los nombramientos de Protomédico y Catedrático de Medicina en don Miguel O'Gorman, de Catedrático de Cirujia en don Agustin Fabre, de Asesor en don José Miguel Carvallo, de Escribano en don Juan José Rocha, y de Alguacil en don Miguel Mansilla, todo en los mismos términos que V. E. espone en la citada carta. Lo participo á V. E. de órden de S. M. para su inteligencia y del Protomedicato. Dies guarde á V. E. muchos años. San Ildefonso. 18 de setiembre de 1799. José Antonio Caballero.

"Señor virey de Buenos Aires."

Antes de esta Real órden, se habia dictado la Real cédula de 1798, en la cual se declara el modo como deben sen tenciarse las causas en el tribunal del Proto-medicato y para donde han de concederse las apelaciones.

La Real cédula de 20 de marzo de 1802, que contiene minuciosamente la historia antigua de la creacion de este tribunal y de la enseñanza de la medicina en esta ciudad, puesto que conjuntamente se establecieron ambas cosas,

prueba que no fué por peticion del virey del Pino que se creó aquel tribunal, y que su origen es anterior á su gobierno. Esa Real cédula estatuye como novedad únicamente la independencia del Proto-medicato de Buenos Aires del de Lima: por esa disposicion no se nombra recien como catedráticos á los señores O'Gorman y Fravre, puesto que hemos visto que estaban ya nombrados, y aprobado su nombramiento por el rey.

Sentimos no reproducir esa Real cédula por su estension, pero es un documento curioso sobre la materia.

Por esa Real cédula se vé que desde 18 de setiembre de 1799, don Agustin Eusebio Fravre era el catedrático de cirujía. Tanto este, como el señor O'Gorman aceptaron sus empleos; y lejos de renunciarlo este último, se suscitaron entre ambos las rencillas y competencias de que abundan las crónicas de la época colonial, lo que dió lugar á dos autos, uno de 26 de noviembre de 1800 y otro de 11 de junio de 1801.

El señor O'Gorman que era médico del hospital de Montevideo y gozaba un sueldo de dos mil ciento setenta pesos, pretendía que él solo constituía el tribunal, y por su reisdencia en aquella ciudad, quiso poner un sostituto para la cátedra de medicina que tenia. El señor Fravre se oponia, y hé aquí las rencillas que fueron elevadas hasta el rey, quien dictó la cédula de 1802, cortándolas y resolviendo todas las diverjencias.

El artículo histórico sobre esta materia de la Revista Farmaceutica tiene curiosos datos y manifiesta la marcha y progresos que la enseñanza de la medicina ha hecho entre nosotros. Hemos rectificado los errores que contiene, en el interés de la verdad y de la historia.

El señor don H. Burmeister publica tambien un artículo científico bajo el título: Observaciones sobre las diferentes especies de Glyptodon en el Museo Público de Buenos Aires. Los señores Murray, Banon, Hanbury y otros, han