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Puerto Príncipe 4 de Octubre de 1816.

Señor Maxwell Hislop.

Mi querido amigo:

Faltaria á la amistad que nos une si no aprovechase las ocasiones que se ofrecen para presentar á U. mis respetos y estimacion.

Aunque nada de nuevo puedo decir á U. todavia acerca de lo que me concierne, sí le diré que lejos de desesperar del éxito de mi empresa, las cosas estan mas propicias.

El General Mina me ha hecho el honor de escribirme de Baltimore con fecha del 21 de Julio, donde se ocupaba de su expedicion que me dice haber organizado con su crédito.-Está destinada á Mejico y una parte de ella ha llegado ya á Puerto Príncipe donde Se espera al General todos los dias. Su carta está llena de elogios para mí, que seria largo referir aquí.

Daré á U. otra noticia: la Isla de Cuba se ha insurreccionado, y empezó la revolucion en Puerto Príncipe de Cuba donde, se dice, perecieron muchos españoles. Parece tambien, segun las noticias, que estos se verian obligados á abandonar el pais--Poco á poco todo se emancipa y recobra sus derechos.

Mientras tengo el gusto de recibir sus gratas cartas presente U. mis respetuosos homenajes á su señora esposa y créame U. siempre su humilde servidor y amigo.

BOLIVAR.

1 S. E. el Sr. Presidente de Haiti.

Puerto Príncipe, Octubre 9 de 1816.

Sr. Presidente:

La pluma es un fiel instrumento para trasmitir con libertad los sentimientos sinceros que me inspira la admiracion! Si la lisonja es un veneno mortal para las almas bajas, los elojios debidos al mérito, alimentau las almas sublimes. Yo me tomo la libertad de escribir á V. E. porque no me atrevo á decirle todo lo que siento por V. E. La ausencia me anima á manifestar el fondo de mi corazon. Es muy dulce sin duda alguna, llenar los deberes del reconocimiento; pero no es un deber el que me dicta los homenajes respetuosos que quiero cumplir.

Veinte y cinco años de sacrificios, de gloria y de virtudes han proporcionado á V. E. el sufragio unánime de sus conciudadanos, de todos los estranjeros ilustres y los de la posteridad que le espera. No es por cierto el poder lo que constituye el más glorioso atributo de la autoridad que un pueblo libre ha confiado á V. E. ni la que constituye el mérito real de V. E. Es un poder superior á todos los imperios es el de la caridad. V. E. es el único depositario de ese tesoro sagrado. El Presidente de Haití es el sólo que gobierna para el pueblo, sólo él manda á sus semejantes.

El resto de los potentados satisfechos de ser obedecidos menosprecian el amor, que hace la gloria de V. E.

V. E. acaba de ser elevado á la dignidad perpetua de jefe de la República por la aclamacion libre de sus conciudadanos, única fuente lejítima de todo poder humano. Está, pues, destinado V. E. á hacer olvidar la memoria del gran Washington, franqueándose una carrera la más ilustre, cuyos obstáculos son superiores á todos los medios. E!

héroe del Norte sólo encontró soldados enemigos que vencer y su mayor triunfo fué el de su ambicion. V. E. tiene que vencerlo todo, enemigos y amigos, estranjeros y nacionales, los padres de la patria y hasta las virtudes de sus hermanos. El cumplimiento de este deber no será muy difícil para V. E. porque V. E. es superior á su país y á su época.

Ruego á V. E. acepte con la indulgencia con que siempre me ha tratado, la expresión sincera de una ilimitada admiración por las virtudes de V. E. de respeto per sus talentos y de agradecimiento por sus favores.

Soy de V. E. muy humilde y obediente servidor.

BOLIVAR.

Sr. Canónigo Cortés Madariaga.

Puerto-Príncipe, Noviembre 26 de 1816.

Mi apreciado compatriota.

En vísperas de partir para Venezuela, aprovecho la oportunidad de dirigir á U. mis últimas letras. Hasta este momento no he podido arreglar mis asuntos, porque los obstáculos se multiplican cuando escasean los medios; pero al fin, yo parto con la esperanza de ver á U., muy pronto en el seno de la patria cooperando eficazmente á la construcción del grande edificio de nuestra República. En vano las armas destruirán á los tiranos, si no establecemos un órden politico capaz de reparar los extragos de la revolucion. El sistema militar es el de la fuerza, y la fuerza no es gobierno: así, necesitamos de nuestros Próceres, que escapados en tablas del naufragio de la revolucion, nos conduzcan

por entre los escollos á un puerto de salvacion. U. y nuestros amigos Roscio y Castillo harian un fraude á la República si no le tributasen sus virtudes y sus talentos, quedándose en una inaccion que seria muy perjudicial á la causa pública. Antes de partir de Los Cayos, en la época de mi primera expedicion, tuve el honor de escribir á U. y al señor Roscio invitándoles á que fuesen á contibuir á la libertad de nuestro pais. No recibí entónces contestacion; mas supongo que este silencio no indica negativa y por el contrario me persuado que UU. juzgaron inútil una respuesta que era demasiado obvia y que ya debia considerarla expresa, aunque fuese tácita.-Concluyo suplicando á U. se sirva comunicar esta carta á sus dignos compañeros de infortunio y de honor, á quienes ruego me dispensen la atencion de escribirles en favor de mis afanes y ocupaciones en un momento tan urgente como el actual. Acepte U. la expresion cordial de mi consideracion, respeto, y amistad con que soy de U. afectísimo compatriota,

Q. B. S. M.

BOLÍVAR.

Sr. General Marion Gobernador del Departamento de los

Cayos.

Puerto Príncipe, Diciembre 4 de 1816.

Sr. General:

Próximo á emprender la marcha para mi patria, á fin de consolidar su independencia, faltaria á la gratitud si no me apresurara á tener la honra de dar á Ud. las

gracias por todas las bondades que ha prodigado Ud. á mis compatriotas. Siento en extremo no poder despedirme de Ud. personalmente para ofrecer á Ud. mis servicios en mi patria en todo aquello en que Ud. tenga á bien ocuparme. Si los favores atan á los hombres no dude Ud., General, que yo y mis compatriotas amaremos siempre al pueblo haitiano y á los dignos Jefes que lo hacen feliz.

Permítame Ud., Sr. General, suplicar á Ud. se digne colmar sus bondades favoreciendo al Sr. Villarel, á quien dejo el cuidado de conducir el resto de nuestra expedicion á Venezuela y sírvase Ud. admitir el homenaje de mi alta consideracion.

BOLÍVAR.

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