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Trujillo, Marzo 5 de 1821.

Excmo. señor General Don Miguel La Torre.

Mi estimado amigo:

Tres dias ha que llegué á esta ciudad con el objeto de tratar con Ud. y con los señores comisionados del Gobierno español, si acaso quisieren acercarse á estas fronteras. Pero he tenido que determinarme á pasar á Barinas por atender à las tropas que allí están, y van marchando hacia aquella provincia, no habiendo ya en ésta víveres con qué mantener ni aún los hospitales. De suerte que me hallo en la necesidad de ir á saerificar nuestras tropas á las calenturas de Barinas, por que no perezcan aquí en medio de les horrores del hambre.

Permítame Ud., querido General, hacerle presente estas desagradables circunstancias, para que acelere su marcha sobre Barinas y tomemos medidas medidas capaces de evitar los males que puede producir una estacion desesperada,por nuestra parte. Cuando nos veamos, manifestaré á Ud. nuestra posicion real, y Ud. se convencerá entonces de la necesidad que tengo de cambiarla.

Aunque sea desagradable para Ud. me tomo la libertad de comunicarle la toma de Lima por el Ge neral San Martin, y la derrota del General Pezuela, á fin de que este suceso ilumine al Gobierno español sobre el verdadero estado de las cosas en América.

Espero la respuesta de Ud. en Barinas, dirigiendo por aquella partę á mi Edecan Alvarez; y tambien espero que Ud. euente siempre con los testimonios cordiales con que soy de Ud.

Su amigo más afectísimo,

Q. B. S. M.,

BOLIVAR.

Trujillo Marzo 9 de 1821..

Señor General Luis Eduardo Azuola.

Mi querido General:

He sabido con un sentimiento extremo que nuestro dignísimo Vicepresidente Roscio está gravemente enfermo y áun en peligro de muerte. Por esta causa y no habiendo ni Secretarios de Estado en funciones, he nombrado á Ud. para que desempeñe el Gobierno en esta extraordinaria crisis, autorizándolo al mismo tiempo para que en caso de vacante nombre Ud. Ministros para el Despacho, si no vinieren á tiempo los señores Gual y Urbaneja que son los nombrados.

Procure Ud. instalar lo más pronto el Congreso con un discurso muy sencillo, pero noble; sin frases estudiadas ni palabras anticuadas. Mucho menos debe haber elogios míos; procurando seguir, en el órden de las materias, el que pronunció Fernando VII en las Cortes, ó el del Presidente de los Estados Unidos en su Congreso.

En seguida debe Ud. tratar de la organizacion del Congreso, para inmediatamente elegir un Presidente y un Vicepresidente de Colombia, pues que los antiguos no tienen validez mientras que no sean nombrados por la Asamblea General de Colombia.-Por mi parte esté Ud. bien cierto, de que no aceptaré más la Presidencia; primero, porque estoy cansado de mandar: segundo, porque estoy cansado de que se me atribuyan miras de ambicion: tercero, porque el mundo creería que no hay quien sirva, en este país para tal Magistratura: cuarto, porque no sirvo sino para militar: quinto, porque el Gobierno estará siempre en orfandad como ha estado hasta ahora, no hallándome con disposicion alguna para desempeñar sus funciones: sexto, porque

mejor sirvo yo en los Departamentos á la cabeza de las tropas sosteniendo al Gobierno: séptimo, porque es necesario que yo pacifique á Venezuela y haga una visita á Quito.-Ultimamente, porque estoy resistido, y si me fuerzan deserto-Hay' en Colombia tres sugetos que tienen reputacion, talento, virtudes, y además son militares que pueden mandar esta República actualmente militar: estos son, los Generales Nariño, Urdaneta y Santander: los nombro por este órden porque es el de sus antigüedades, no porque yo le dé preferencia á ninguno; pues todos, en mi concepto, tienen un mérito igual. Además, hay muchos paisanos que pueden ser Presidente, mas yo pienso que por grande que sea su mérito no conviene en el dia que lo sean: sin embar go, ustedes pueden discurrir con más imparcialidad que yo en esta materia; y por consiguiente con más acierto.

Suplico á Ud, comunique este artículo de mi carta, á todos mis amigos, para que en el Congreso se esfuercen en impedir que se me vuelva á nombrar Pre-· sidente.-Bien entendido que yo no seré más Presidente y que si á mi pesar me nombran, estaré siempre ausente de la capital, ó siempre enfermo.-Declárelo Ud. así al Congreso, en mi nombre, para que entienda que el Vicepresidente de Colombia será el verdadero Presidente y elijan por lo mismo al más propio para desempeñar estas funciones.

Amigo querido: págueme Ud. con este servicio todo el afecto que le profesa, el que más le ama de co

razon,

BOLIVAR.

P. D.-Mando á Ud. el mensaje del Presidente Monroy que aunque está en inglés puede hacerse traducirSobre negocios extranjeros debe Ud. decir que estamos

en armonía con todos los Gobiernos del mundo, excepto el de España; sobre el cual dirá Ud. los tratados de armisticio y regularizacion de guerra, y la mision de paz enviada á Madrid. Añada Ud. que con los Gobiernos Independientes de América, tenemos las relaciones más estrechas, y que con algunos de Europa las esperamos muy satisfactorias.-En esta parte sea Ud. muy circunspecto, para no dar presa á los enemigos y neutrales. Sea Ud. profuso en ostentar: 1? la mencion de Colombia: 29 su gloria militar: 39 la conservacion de sus provincias libres: 4° la unidad en la marcha, así política como militar: 59 la buena administracion de justicia: 69 la mejora de las rentas; y 79 la esperanza probable de un arreglo satisfactorio y final, con la paz ó la victoria. Pero en todo esto siga Ud. el órden que le parezca más natural y conveniente. Incluyo á Ud. mi nota á La Torre, sobre Maracaibo, para que tambien hable Ud. del derecho que tenemos para protejer aquella ciudad.-Tambien va un oficio de La Torre sobre Maracaibo.-Consulte Ud., amigo, á los Secretarios, Osorio, Rergara y Azuero, para que con franqueza corrijau su discurso imitando la sencillez del Americano. Mire Ud. que este paso va á dar á Ud. mucho honor y por lo mismo no debe desdeñarse nada de lo que pueda mejorarlo.

BOLIVAR.

Achaguas, Marzo 22 de 1821.

Señor General Soublette.

Mi querido General :

Ayer he llegado aquí despues de haber pasado por Mérida y Barinas. En todos estos países he hallado

nuestras tropas pereciendo de miseria por la escasez de víveres y por el mal clima. Esta consideracion me ha obligado á notificar al General La Torre, que si los comisionados pacificadores no tienen facultades para hacer la paz, cuarenta dias despues de recibida aquella nota se abririan las hostilidades, segun el artículo 12 del armisticio. Consiguientemente, el 30 de abril debe abrirse la campaña, y Udes. por el Oriente deben hacer inmediatamente lo siguiente: 19 Mandar poner en insurreccion los valles de Capaya é introducirse en ellos con el motivo de amparar á los que los llaman y aprovecharse del fin del verano que por aquella parte es necesario. 29 Acelerar la expedicion de Margarita para que llegue á tiempo. 39 sacar 500 hombres de la costa de Cumaná, por agua,, para que vayan á desembarcarse en la laguna del Tacarigua.--Esta operacion debe hacerla el mismo General Bermúdez con dos ó más buques mayores, sean de Margarita ó sean del infierno. 4 El General Monágas con todas las fuerzas disponibles que hay en Barcelona, debe ir á esperar al General Bermúdez á los valles de Capaya. 59 El General Zaraza con toda la caballería que pueda reunir que marche sobre Calabozo en los primeros dias de Mayo, y si no hay obstáculo, que entre por la Villa de Cura. 69 El Ejército de Oriente debe tomar á Carácas del 15 al 20 de Mayo é inmediatamente salir á los valles de Aragua sin perder un momento, á ponerse en comunicacion con las tropas de mi mando, que para entonces estarán en Valencia, por lo ménos. 79 El Vicepresidente debe acercaise al Ejército de Oriente para dirigir inmediatamente todas las opera-. ciones de la costa, y de las tropas que están á sus órdenes para seguir volando á Carácas á arreglarlo todo y levantar cuerpos allí.-8o La ciudad de Cumaná será bloqueada por simples guerrillas, solo con el objeto de molestarla.-99 La expedición de Margarita

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