...; es ademas manco i no puede manejar una lanza. La ostentación de fuerzas numerosas le incomoda ; pocos soldados, pero bien instruidos. Dejadle formar...ejército ; esperad que os diga ya está en estado, i concededle que escoja el terreno en que ha de dar la batalla, i podéis fiarle entonces la suerte...

...caballo ; es además manco y no puede manejar una lanza. La ostentacion de fuerzas numerosas le incomoda; pocos soldados, pero bien instruidos. Dejadle formar...que escoja el terreno en que ha de dar la batalla, y podeis fiarle entónces la suerte de la República. Es el espíritu guerrero de la Europa hasta en...

...es, ademas, miffico i'úó podria manejar una lanza. La ostentacion de fuerzas numerosas le incomoda; pocos soldados, pero bien instruidos. Dejadle formar...ejército, esperad que os diga: ya está en estado, i concededle que escoja el terreno en que ha de dar la batalla, i podeis fiarle entónces la suerte...

...soldados, pero bien instruidos. Dejadle formar un ejercito, esperad que os diga: ya está en estado, i concededle que escoja el terreno en que ha de dar la batalla, i podéis fiarle entonces la suerte de la República. Es el espíritu guerrero de la Europa hasta en...

...disciplina; apenas podría manejar " una lanza. La ostentación de fuerzas numerosas, le incomoda; " pocos soldados, pero bien instruidos. "Dejadle formar...el terreno en que ha de dar la " batalla, y podéis flarle entonces la suerte de la República. Es el " espíritu guerrero de la Europa, hasta en el arma...

...barbarie pampeana. El general Paz, todo táctica y matemáticas, es puro producto de esta ciencia: "... es el espíritu guerrero de la Europa hasta en el...científico, calculador. Una batalla es un problema que resolver por ecuaciones, hasta dar con la incógnita, que es la victoria,.." Durante largo tiempo la...

...es, además, manco, y no puede manejar una lanza. La ostentación de fuerzas numerosas lo incomoda, pocos soldados pero bien instruidos. Dejadle formar...estado» y concededle que escoja el terreno en que ha de librar la batalla, y podeis fiarle, entonces, la suerte de la república». Y es la suerte de la república...