La pesadilla de Rivera.-Funestas noticias del sur.-Desgraciado viaje de la galizabra. Váse a pique i mueren veinte de sus tripulantes.-Cómo salvaron los demas.-Culpa Rivera al piloto,-Deplorables resultados de esta desgracia.-Ignora Rivera largo tiempo lo sucedido. Manda & Arraes con algun socorro a Valdivia.-Encuéntrase con el barco que viene de Chiloé i, contra lo mandado, se vuelve a Penco.-Fundacion del fuerte de la Trinidad en Valdivia.-Comienzan los indios a molestarle.-La necesidad obliga a sus defensores a efectuar salidas.-Prisiones i muertes.-El ataque de 24 de Betiembre de 1602.-Son rechazados los asaltantes: pero queda entre los muertos españoles el comandante del fuerte.-Toma el mando Gaspar Viera.-Envia un mensajero a Hernández Ortis.-Cojen i matan al mensajero los indios.→ Las pérdidas del fuerte durante el gobierno de Ortiz de Gatica.-El hambre en Valdivia. Estremos a que reduce a los pobladores de Osorno.-Conclúyense en Valdivia las raciones. La lista de los que han muerto de hambre. -Desertores. - Indignacion de Rivera por la desobediencia de Arraes.-Lo encausa i vuelve a mandar el barco.-Ordena la salida de otro buque.-Prepara un tercer socorro.-La responsabilidad de Rivera.-Piensa éste hasta en la modificacion de su plan de guerra.-Las órdenes que debia cumplir Cárdenas i Añasco.-Llega el primer socorro a Valdivia. - Nombra Rivera comandante de Valdivia a Gaspar Doncel.-A lo que estaba reducida la guarnicion del fuerte. Los sacerdotes soldados.-Sirve de artillero el cura Serrano. Los caciques amigos don Cristóbal i don Gaspar.-Arriba a Concepcion el barco enviado por Doncel.-Envia Rivera otro socorro a Valdivia.-Manda tambien el patache para repartir socorros a Valdivia i Osornɔ.-Viénese el gobernador a Santiago.

Las ciudades australes, estaba escrito, debian ser la eterna pesadilla de Alonso de Rivera. Mientras todo prosperaba en las comarcas del Biobio i al norte de él, lo que quedaba del sur en el continente, es decir, el nuevo fuerte de Valdivia i la ciudad de Osorno, pasaban cada vez por mas terribles pruebas, i las noticias que de allá venian al gobernador eran mui a propósito para acibarar la satisfaccion que le producia el relativo bienestar que iba proporcionando al reino.

H.-T. II.

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En este año, antes de venir a invernar a Santiago, le llegaron funestísimas noticias de aquellos parajes.

Se recordará que, a mediados de junio de 1602, zarpó de Concepcion hacia el sur la galizabra con las provisiones i pertrechos que en aquel entónces le fué posible reunir a Alonso de Rivera. En ella iba el maestre de campo don Antonio Mejía, a cuyo cargo debian quedar las posesiones australes de Chile, el sarjento mayor Francisco Rosa, cuñado del infeliz coronel del Campo, i « otros capitanes i soldados que por todos, con la jente de « la mar, eran cincuenta i seis >> (1).

Desde su salida le hizo mal tiempo i tuvo que guarecerse en el puerto de La Mocha. I apénas hubo de nuevo emprendido el viaje, un furioso norte le llevó a las mas apartadas costas del archipiélago de Chiloé. Ocho dias despues de haber salido de Concepcion se estrelló durante la noche contra una roca i se hizo pedazos. Perccieron veinte personas i « entre ellas el maes« tro de campo i el sarjento mayor Francisco Rossa i el capitan « i el piloto del navío (2). Los otros escaparon con el capitan << Blas Perez de Esquibias para verse en nuevos peligros i tra«bajos; porque para salir de aquella isla inhabitable i peñas«< cosa, verse fuera de las olas de la mar i llegar a Chiloé, pasa<«<ron muchos infortunios » (3). I quizá muchos de ellos habrian perecido si oportunos ausilios, enviados de Castro, no los hubieran puesto en salvo.

Alonso de Rivera culpa de la pérdida de la galizabra al piloto i asegura que, segun los informes que habia recibido, pudo entrar al puerto de Valdivia i no lo hizo por impericia o falta de cuidado.

(1) Rosales, en el capítulo XXIII del libro V, dice que en la galizabra iban veinticinco capitanes i cien soldados. Seguimos a Rivera, carta al rei fechada en Rere en 5 de febrero de 1603, cuyas son las palabras que hemos copiado i las que coniemos sin asignarles otro orijen. Esta carta nos sirve de guia en el presente capítulo.

(2) Citada carta de 5 de febrero de 1603. Segun Rosales, ademas de veinte hombres, i no entre ellos, murieron los cuatro oficiales nombrados. (3) Rosales, lugar citado.

En aquellas circunstancias se consideraba i con razon gravísima pérdida la de treinta i seis hombres, sin contar con que algunos de ellos eran distinguidos capitanes; pero aún mas funesta para la colonia habia de ser la falta de las provisiones enviadas al sur, de las cuales tanto necesitaban los pobladores i defensores de Osorno i Valdivia. Todavia si el gobernador hubiese sabido la fatal noticia en tiempo oportuno para enviar otro barco, las desgracias habrian sido harto menores; pero Francisco Hernandez Ortiz, que gobernaba las comarcas australes, i que, si hemos de creer a Alonso de Rivera, supo la pérdida de la galizabra en el mes de julio, no escribió dando aviso de lo sucedido hasta el 20 de diciembre. Debemos suponer, pues nadie estaba mas interesado que Hernandez Ortiz en recibir socorro, que se vió en la imposibilidad de obrar de otro modo; i ello es fácil de imajinar sabiendo la estrema escasez que en Chile habia de embarcaciones, la mayor parte de las cuales, si no todas, debian de estar en Concepcion i Valparaiso,

Como en tanto tiempo no recibiese Alonso de Rivera noticias del sur ni volviese la galizabra, creyó necesario enviar otro barco a Valdivia, con alguna hariņa, tosino i vino para aquel lugar. « Salió de Arauco el 15 de diciembre al mando de Arraes <con órden de llegar a su destino,» aunque se encontrara con la galizabra en el viaje, « a dejar aquel refresco i a traer las nuevas << que hubiese.»

En el camino se encontró Arraes con el barco que venia de Chiloé, i por él supo no solo la noticia de la pérdida de la galizabra sino tambien la gran necesidad en que estaba Valdivia i Osorno. ¿Cómo, en vista de esto i de la órden espresa que, segun dice Rivera, tenia de seguir su camino, se volvió con el otro barco a Concepcion? Indudablemente, para tomar tal rumbo, cuya responsabilidad no podia ocultársele, debió de tener razones que ignoramos. Solo sabemos lo que al rei dice Alonso de Rivera, quien, léjos de disculpar a Arraes, avisa que le está formando causa.

¿Qué sucedia, mientras tanto, a los desgraciados habitantes

de Valdivia, a todas luces los mas desamparados i sin recursos, ya que el grueso de la fuerza estaba en Osorno?

Hernandez Ortiz habia fundado el fuerte de la Trinidad en Valdivia, que en su ánimo i en el de Rivera debia ser el principio de la nueva ciudad, por todos juzgada necesaria, el 13 de marzo de 1602 (4), i con una guarnicion de mas de doscientos. veinte hombres, muchos de ellos con sus familias, lo dejó al mando del capitan don Rodrigo Ortiz de Gatica (5).

Caida Villarica en poder del enemigo, se encontraba éste con mas libertad i fuerzas para atacar el nuevo fuerte, el cual con Osorno eran las solas posesiones que en el continente oponian resistencia a la pujante insurreccion al sur del Biobio; pero una guarnicion de ciento veinte hombres aleccionados por larga i tremenda esperiencia infundia respeto a los indios mas audaces.

Por lo tanto, renunciando en los primeros tiempos a atacar la plaza i limitándose a la guerra que mejores efectos les producia siempre, se dieron a asechar en los alrededores del fuerte i a sorprender a cuantos salian de él. Antes de mucho estas salidas se hicieron necesarias por la escasez de víveres i por el deseo de recojer mieses i frutas o de pescar en las cercanías; i en una de ellas murió a manos de los indios el soldado Juan Gutierrez, i tam

(4) Lista de los capitanes i oficial real, vicario i cura i capellan, cte., escrita por el comandante de la plaza, capitan Gaspar Doncel, el 24 de enero de 1603.

Rivera, que habia creido necesario el restablecimiento del fuerte de Valdivia, comenzó por censurar el sitio en que se le habia colocado, el mismo, por lo demas, en que habia estado la antigua ciudad: "El fuerte de Valdi via....... no es allí de ningun momento, dice al rei en su carta escrita en "Concepcion el 29 de abril de 1603, porque a los enemigos no los ofende no 'puede ni se da la mano con Osorno ni se puede comunicar dél a la otra "Valdivia con ménos de doscientos hombres I si el enemigo de Europa "entrase en aquel puerto no tiene aquella jente defensa ni está en el pues"to que el enemigo habrá de tomar si acaso lo tomase; el puerto principal "está tres leguas mas abajo en el puerto que llaman del Corral. I para el socorro de Osorno es mejor puerto el de Carelmapo, aunque es cinco o "seis leguas mas largo; porque van i vienen veinte hombres por estar "aquel camino casi todo de paz. De manera que el dicho puerto de Valdi46 via no sirve sino de tener allí aquella jente mui aventurada i de hacer costa i ocupar un navío en socorrerlos, aventurando a que se pierda I con la dicha jente, aunque no es mucha se podrá hacer en otra parte me"jor efecto. Al virei del Pirú le he escrito sobre esto i conforme a lo que me "respondiese i al socorro que me enviaso habré de tomar resolucion." (5) Id. id.

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bien en esa u otras ocasiones cayeron en su poder i quedaron cautivos otros dos, i cuatro perecieron ahogados (6).

Sin embargo, como tales ventajas eran mui pequeñas i el tiempo pasaba, los indios se resolvieron a dar un asalto al fuerte; i, reuniéndose en gran número, consiguieron entrar a él i trabaron dentro de sus muros encarnizado combate el 24 de setiembre de 1602.

La superioridad de las armas i de los soldados españoles se sobrepuso de nuevo al número, i los asaltantes fueron derrotados i arrojados de Valdivia; pero los defensores del fuerte pagaron su victoria a subidísimo precio: entre los muertos que dó nada menos que el comandante de la plaza, capitan don Rodrigo Ortiz de Gatica. Murieron igualmente el atambor Pedro Montera i el soldado Francisco Hernandez (7).

Tomó el mando el segundo comandante Gaspar Viera i lo primero que hizo fué enviar a un soldado nombrado Moriana a Osorno para que dicra cuenta de lo sucedido i pidiese socorros a Hernandez Ortiz; pero no era fácil empresa atravesar el estenso territorio ocupado por el enemigo i Moriana fué cojido i muerto por los indios.

Hasta ese momento, el fuerte no tenia que deplorar entre sus defensores gran número de bajas; pues a las de los once mencionados solo hai que agregar las de otros cuatro, fallecidos « de << enfermedad que Dios les dió » (8).

Quince hombres no habrian sido gran pérdida, si a ella no se hubiese venido a unir la miseria cada vez mas apremiante, miseria que mui pronto se convirtió en hambre espantosa, tanto mas espantosa cuanto que ni siquiera podian aguardarse recursos de Osorno, ya que esta ciudad se encontraba en tan críticas circunstancias como Valdivia.

(6) Lista de los capitanes i oficial real, vicario i cura i capellan, etc., escrita por el comandante de la plaza, capitan Gaspar Doncel, el 24 de enero de 1603. Los apresados por los indios fueron Diego Hernandez i Mirando Hernandez Bravo; los cuatro ahogados se llamaban Francisco de Mendieta, Francisco Toscano, Bartolomé de Guevara i Bartolomé Guerrero.

(7) Id. id.

(8) Id. id.