He aquí la esplicacion que da Alonso de Rivera: « Esto lo hizo pareciéndole que tenia hombre puesto en Chile al que « convenia para aquel reino. I para que Vuestra Majestad se « enterase de que era ansi, quiso que el dicho Alonso García « tuviera lugar de hacer la guerra aquel verano, pareciéndole que habia de poner el reino de paz. I asi era plática entre algunos criados del virei de que yo era mui venturoso, pues «habia de hallar toda la tierra de paz i no habia de hacer mas « de gobernarla i gozar del fruto della, i sin duda entiendo que « el dicho virei lo entendia ansi » (8).

༥

Creemos que en esta vez no se equivocaba Rivera. Aunque hablando de él decia al rei don Luis de Velasco el 7 de diciembre de 1600: « Yo quisiera de poderle despachar de aquí con «mas brevedad; pero no ha sido pusible por no haber en este « puerto navíos de Vuestra Majestad dispuestos para la navega«cion, de cuya causa ha sido forzoso fletar i aderezar dos de « particulares en que vayan i se lleven el socorro de ropa i per<< trechos necesarios para esta jente i la que está en Chile i la «demas que Vuestra Majestad mandare venir por Buenos Aires: « todo se va comprando i recojiendo a la mayor priesa que es «pusible para que con ella se vayan; » con todo, de lo que el mismo virei dice en otro aparte de la citada carta parece deducirse claramente lo que Rivera afirmaba despues. En efecto, habla en ella de las « esperanzas que hai de que con la llegada « del macse de campo Alonso García Ramon se habrá mejorado « todo. » E inmediatamente completa su pensamiento, añadien« do: «No he tenido aviso de que haya llegado i ya tarda, e importaria tenerle antes de despachar al gobernador Alonso de « Rivera porque habria luz para lo que se va proveyendo i para « ajustarlo con la necesidad. »

Nada es de estrañar, por lo demas, tal conducta en el virei:

do

(8) Alonso de Rivera al rei, carta escrita en Córdoba el 20 de marzo 1006. Las mismas quejas las repite en la carta escrita en Santiago del Estero el 16 de marzo de 1607.

tenia, i con justicia, el mas alto concepto de Alonso García Ramon, a quien consideraba, si no el mejor, uno de los mejores militares de América i, sin disputa, el mas esperto en las cosas de Chile: habia, pues, de sentir en el alma su remocion i de procurar retardarla cuanto fuera posible.

Alonso de Rivera no perdió el tiempo de su forzada permanencia en Lima. A mediados de noviembre comenzó a dirijir a don Luis de Velasco una interminable serie de memoriales referentes a las armas que necesitaba su tropa; a los víveres que era preciso traer a Chile; a los arbitrios que habian de tomarse para impedir el arribo de los piratas a estas costas; a la manera como debia fiscalizarse en Chile la inversion del situado; al sueldo del gobernador, que él queria que se le adelantase, etc., etc.

En uno de esos memoriales, despues de recordar que el rei ordenaba se enviasen a Chile sesenta mil ducados de situado cuando llegasen los mil i tantos hombres que debian venir por Buenos Aires, pedia a don Luis de Velasco que, atendiendo al triste estado en que se hallaba Chile i a que el virei habia mandado acá mas de mil soldados, cosas que el rei ignoraba, le diese desde luego el monto completo de ese situado. El virei encontró justo este pedido i Rivera pudo venir a Chile « con <«< cincuenta i cinco mil ducados en jéneros de ropa, a tiempo «< que valia mui subidos precios, descontando lo restante a cum« plimiento de los sesenta mil de la situacion de un año por <«< cuarenta i tres mil i ochocientos reales, que se dieron para re« fresco a la jente, a razon de quince reales de a ocho a cada sol<«<dado i otros doce mil i ducientos i cuarenta reales que se les «< compraron de frazadas » (9).

Al hablar al rei de los sesenta mil ducados que trajo en esta vez, dice que « el socorro de ropa se ha comprado en precios tan « subidos respecto de los que suelen ser ordinarios en otros <«< tiempos, que no monta todo cuarenta mil ducados » (10).

(9) Citadas instrucciones a Domingo de Erazo. (10) Citada carta do 3 de diciembre de 1600.

Instó Alonso de Rivera que el virei señalara el sueldo de que debia gozar cada militar; pero don Luis de Velasco se negó una i otra vez a hacerlo. I refiriendo al rei (11) su negativa, se apoya para justificarla en la opinion de don Alonso de Sotomayor i de otras muchas personas entendidas en las cosas de Chile, que asi lo han creido conveniente.

La otra peticion en que mas instó Alonso de Rivera fué la de artillería, de que tanto se habia menester en Chile. I a pesar de que don Luis de Velasco proveyó a su memorial: « Aquí no hai artillería ni artilleros que podelle dar, si no se <«< desarman los dos navíos que ellos tienen para defensa deste « reino i de su real hacienda, » todavia insistió nuevamente. El virei se mantuvo en su negativa, proveyendo que: « En cuanto «a la artillería de ninguna manera se le puede dar por haber « falta della, i, pues en Chile hai cobre i se trae para vender, el << dicho gobernador podrá hacer lo que fuese apropósito, habien<«< do maestros, i no los habiendo, podrá inviar aquí el cobre don«de se mandará lo que conviniere hacer. »

En todas estas dilijencias, en las que solo obtuvo el nuevo gobernador lo que podia aguardar de un mandatario celoso por el bien del reino, pero no benélovo al solicitante, se pasaron dos meses largos desde su llegada a Lima. Estuvo ahí i en el Callao hasta el 24 de diciembre de 1600 (12), dia en que zarpó, en fin, para Chile, despues de recibir órden del virei de desembarcar en Valdivia para acudir inmediatamente en ausilio de las ciudades australes, de cuya terrible situacion llegaban, unas tras otras, las mas funestas noticias a don Luis de Velasco.

(11) Carta de don Luis de Velasco al rei, fecha a 7 de diciembre de 1600. (12) Instrucciones dadas por Alonso do Rivera a Domingo de Erazo el 15 de enero de 1602.

CAPÍTULO III.

LOS DOS ALONSOs.

I.

www

Rivera no cumple la órden de desembarcar en Valdivia.-Diversas razones que alega. Lo que probablemente habria sido de Chile si Rivera hubiese ido a Valdivia.-Acude García Ramon al llamado de Rivera.- La carta del virei a García Ramon: ruégale que se quede un año en Chile.-Muéstrase dispuesto García Ramon a hacerlo así.-Comunica a Rivera su plan de campaña: tres puntos que abraza.-Ofrécese a llevar la espedicion al sur i fundar un fuerte en La Imperial.-Celada que en esto ve Rivera.-Pide su opinion a los principales jefes del ejército.-Impaciencia de García Ramon. -Presenta un memorial exijiendo pronta respuesta.-Cortés, pero altiva, respuesta de Rivera.-Niégase a exijir a su predecesor que permanezca en Chile. -Ordena la reunion de un consejo presidido por García Ramon.-Al pedir la opinion de los otros, emite la suya.-Inmediatamente pide autorizacion García Ramon a Rivera para irse al Perú.-Términos en que Rivera se la concede.-Lo que dice al rei.

Se ha visto que el virei dió órden a Alonso de Rivera de ir directamente a Valdivia i socorrer las ciudades australes, pues García Ramon le habia escrito «que para Navidad estaria en « aquel puerto» (1). A pesar de eso, el nuevo gobernador no lle

(1) Carta de Alonso de Rivera al rei, fechada en Aranco el 10 de marzo de 1601. Como dijimos en el capítulo XXXV del tomo I, García Ramon en carta escrita en Santiago el 12 de octubre de 1600 a Alonso de Rivera, le aconseja que desembarque en Concepcion, donde se propone esperarlo: "Para "Navidad, si Dios fuese servido, la terné [la jente] en la Concepcion, donde "soi de parecer Usía vaya a desembarcar en esta ocasion, a donde besaré a Usía sus manos i advertiré como criado de Su Majestad de lo que con "tan larga esperiencia supiere."

Parece que esta carta no llegó a manos de Rivera ántes de su viaje a Chile: si la hubiera conocido, ni el virei le habria dicho que fuese a juntarse con García Ramon en Valdivia, pues habria sabido que éste ya no pensaba en ir allú, ni el mismo Rivera habria dejado de mencionar el aviso de García