REPETICIÓN. Escríbase una carta á un amigo ó á la profesora. Téngase cuidado de la manera como se ha de principiar y terminar, doblar y dirigir la carta. do! estu Qué su = no ién no Ho! Por su Po ese ci ni LECCIÓN XI. LAS ABEJAS. 1. Todos los niños que hayan vivido ó estado en el campo habrán visto probablemente las abejas. Son unos animalitos pequeños, y los más útiles entre todos los insectos. Centenares de abejas viven juntas en unas casitas llamadas colmenas, ó también en huecos que suele haber en los troncos de los árboles viejos. Cuando el tiempo está seco se ocupan durante todo el día en recoger la miel y hacer la cera, y cuidar de las abejitas pequeñas. 2. En cada colmena hay tres especies de abejas: muchas trabajadoras, algunos zánganos y una reina. La reina ó abeja maestra pone una gran cantidad de huevos, á veces hasta dos cientos por día. Poco tiempo Poco tiempo después salen de estos huevos unos bichitos blancos, que no semana, siendo cuidadosamente atendidos por las abejas trabajadoras. 3. Una vez que estos bichitos han comido hasta hartarse, se hacen una tela alrededor y se echan á dormir. Duermen once días, y cuando se despiertan ya han dejado de ser bichitos blancos y se han transformado en abejas. 4. La reina, lo mismo que los zánganos, están en la colmena todo el tiempo. Los zánganos son grandes y perezosos y sólo sirven para comer. Muchas veces las abejas trabajadoras se cansan de sustentarlos y los matan á picotazos. y 5. Las abejas trabajadoras hacen los panales los llenan de miel. Cuidan de la limpieza de por ido y se la colmena y atienden á la reina y á las abejitas pequeñas. Conocen muy bien todas las flores de los jardines, puesto que sacan de ellas la miel. LENGUAJE. Convérsese con los niños respecto á las abejas. Hágaseles escribir una descripción de las abejas. Ordéneseles hacer una lista de las palabras derivadas de esta lección. Descríbase el grabado á continuación. LECCIÓN XII. LA HIJA DEL TORRERO. I. 1. ¿Qué es un faro? Es un edificio en forma de torre alta y redonda. En su interior hay escaleras para subir hasta la parte superior, donde hay una especie de cuarto de cristales que parece una lámpara grande. Allí se mantiene ardiendo toda la noche una luz muy brillante. 2. Se fabrican esos faros en las playas ó en los islotes próximos á la costa. Sirven para avisar á los capitanes de los barcos que en aquellos puntos hay peligro de que sus embarcaciones, si se aproximan mucho, queden encalladas ó despedazadas en las rocas. 3. ¿Y quién cuida de que la luz esté siempre encendida de noche? Un hombre que vive en cada uno de dichos faros. 4. Ese hombre debe ser persona leal y de toda confianza. Tiene que encender puntualmente las luces del faro todas las noches, para que los barcos puedan guiarse por ella en medio de la obscuridad. Por ningún motivo debe dejar de cumplir su deber, ni abandonar su puesto. 5. Roberto era el encargado del faro en una islita cerca de una costa montañosa en la América del Norte. La isla estaba á más de media legua de la costa. El vivía solo en el faro, sin otra compañía que la de su hijita Ana, de ocho años de edad. 6. ¡Bien podemos imaginar lo aislada que vivía allí la pobre niña! Los únicos compañeros que tenía para jugar, eran un perrito y un gatico. Así y todo, Ana era feliz; pues su padre la quería con delirio y ya ella se había acostumbrado á vivir en el faro. 7. Una mañana tuvo Roberto que ir á la playa en su bote á buscar alimentos y aceite. Á él no le gustaba dejar á su hija sola; pero el mar estaba tranquilo y tenía la certeza de volver pronto. 8. Al irse preguntó á Ana si tenía miedo de quedarse sola hasta la tarde. "¡Oh, no!" respondió ella, "no tengo miedo ninguno; voy á subir á la farola y distraerme mirando las nubes hasta que tú vuelvas, papá." 9. Entonces el padre besó á su querida hijita, saltó en el bote y se hizo á la vela para el continente, esperando volver al faro dentro de pocas horas. |