 Era la tarde, y la hora En que el sol la cresta dora De los Andes. El desierto Inconmensurable, abierto Y misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno Como el mar, cuando un instante, Al crepúsculo nocturno, Pone rienda...  Coleccion de poesias - Página 115por Enrique José Gregorio de Arrascaeta - 1881 - 350 páginasVista completa - Acerca de este libro
 | Enrique García Velloso - 1914 - 504 páginas
...Echeverría? Su poder pictórico es extraordinario cuando dice: «Era la tarde y la hora En í|iie el sol la cresta dora De los Andes... El desierto Inconmensurable, abierto Y misterioso, a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno, Como el mar, cuando un instante... | |
 | Emilio Alonso Criado - 1916 - 176 páginas
...publicación más importante y sobre todo más americana; nos referimos a «La cautiva», su obra maestra. Era la tarde, y la hora En que el sol la cresta dora...El desierto Inconmensurable, abierto Y misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblanle, Solitario y taciturno, Como el mai, cuando un instante... | |
 | Emilio Alonso Criado - 1916 - 184 páginas
...todo más americana; nos referimos a «La cautiva», su obra maestra. Era la tarde, y la hora En (fue el sol la cresta dora De los Andes. El desierto Inconmensurable, abierto Y misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno, Como el mar, cuando un iiistiiulp... | |
 | Calixto Oyuela - 1919 - 600 páginas
...su aroma inefable me embriago, Y a ella sola consagro mi amor. LA CAUTIVA PRIMERA PARTE EL DESIERTO Era la tarde, y la hora En que el sol la cresta dora...El desierto Inconmensurable, abierto, Y misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno, Como el mar, cuando un instante,... | |
 | Julio A. Muzzio - 1920 - 316 páginas
...supera a La cautiva, precioso poema, genuinamente americano. He aquí su primera estrofa: EL DESIERTO Era la tarde y la hora en que el sol la cresta dora...El desierto, inconmensurable, abierto y misterioso, a sus pies se extiende; triste el semblante, solitario y taciturno, como el mar cuando un instante,... | |
 | Julio A. Muzzio - 1920 - 308 páginas
...supera a La cautiva, precioso poema, genuinamente americano. He aquí su primera estrofa: EL DESIERTO Era la tarde y la hora en que el sol la cresta dora...El desierto, inconmensurable, abierto y misterioso, a sus pies se extiende; triste el semblante, solitario y taciturno, como el mar cuando un instante,... | |
 | 1920 - 392 páginas
...pincel del artista le haga sentir las delicias que inundan el alma de misterios al leer aquello de: "Era la tarde, y la hora En que el sol la cresta dora De los Andes. El desierto Inconmensurable ". Y así como el poeta canta nuestra existencia de antaño, así el decorado que rodea al niño le... | |
 | J. E. Gramajo - 1922 - 414 páginas
...cualquier circunstancia de la vida saben, como la Samaritana, prodigar el óleo y el vino. Birón. Era la tarde, y la hora En que el sol la cresta dora...El desierto Inconmensurable, abierto Y misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno Como el mar, cuando un instante,... | |
 | J. E. Gramajo - 1922 - 408 páginas
...e» cualquier circunstancia de la vida saben, como la Samaritana, prodigar el aleo 7 el rino. Birtn. Era la tarde, y la hora En que el' sol la cresta dora...De los Andes. El desierto Inconmensurable, abierto T misterioso a sus pies Se extiende, triste el semblante, Solitario y taciturno Gomo el mar, cuando... | |
 | Alberto Ghiraldo - 1922 - 288 páginas
...(Argentino. 18S5-1MI) t EL DESIERTO (Introducción al poema «La Cautiva»). Era la tarde, y la hora En vque el sol la cresta dora De los Andes. — El Desierto Inconmensurable!, abierto, Y misterioso a sus pies Se extiende; —triste el semblante, Solitario y taciturno Como el mar, cuando un instante... | |
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